Tecomán, Col.- Roberto Campuzano López, director de la Unidad Municipal de Protección Civil en Tecomán, señaló que el peligro de que las personas que van a pescar a la Laguna de Ámela sigue latente por la presencia de cocodrilos debido a alto nivel de agua.
Comentó que antes del paso de las tormentas la laguna estaba seca, con la Tormenta Tropical Dolores llegó a una capacidad del 40% y con el huracán Enrique subió a un 90% de su capacidad total que es de 30 millones de m3 “es decir que está a poco de su límite para desbordamiento”
“El año pasado tuvimos el caso de una persona que se cayó con todo y panga y la consecuencia fue fatal, la persona sigue desaparecida y eso nos genera problema”.
El agua desbordada de la presa sale al canal llamado “Zanja Prieta” que desahoga en el estero de El Chupadero que sale al mar.
Este vaso de almacenamiento de agua natural de mayor capacidad del Estado de Colima entonces el peligro para los pescadores siempre lo existe, señaló al mismo tiempo que recordó que ahí se encuentran los cocodrilos en su hábitat “existe una cooperativa que no da permiso a las personas que vayan a pescar, ellos saben cómo manejarse, pero aun así las personas acuden para sacar alimento y ahí es donde tenemos las consecuencias”.
Por ahora el canal de Zanja Prieta sí lleva su máxima capacidad por lo que el responsable de PC en Tecomán confió en que tengan tiempo de seca para que baje la laguna y haya espacio en la captación con otra tormenta, “tenemos poco de margen de captación, afortunadamente el pronóstico es solo de los remanentes de Enrique, ondas nubosas que vienen sobre el mismo sistema y genera lluvias intermitentes serenas sin problema. No tenemos boletín donde nos informe la formación de otro fenómeno cerca”.
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